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Por
más que se tiende a simular su sonido mediante samples
y electrónica por una cuestión de practicidad, pocas
cosas dependen tanto de la mano de un músico como la batería
acústica. Este es un instrumento naturalmente poderoso,
lo suficiente como para condicionar el volumen del resto de los
instrumentos y del monitoreo sobre un escenario en un ambiente
mediano. Y la grabación de ese poder es una de las tareas
más arduas en un estudio, pensando en que la batería
es un conjunto de instrumentos individuales de percusión
que deben tocarse al mismo tiempo, ya que el objetivo sería
capturar el sonido natural de todo el conjunto ampliando la contundencia
de la tarola y el bombo, de ser necesario. Depende del sonido
que busques, es posible que no necesites más de cuatro
micrófonos para captar todo su sonido. Y el secreto mayor
no es la cantidad de micros. Supongo que ya te estás preguntando
a qué me refiero... mejor sigue leyendo.
Preparando
la batería
La
primer idea es dejar la batería lista para grabar con el
mejor sonido posible, porque una batería que suene mal tendrá
un mal sonido en la pista. No quiero ahondar demasiado en el ambiente
donde se sitúe, porque tal tema amerita otro artículo
completo. Arma la batería con parches nuevos (en lo posible,
cambia el parche superior de la tarola por lo menos) y sobre una
alfombra, para evitar desplazamientos. Si puedes evitar usar un
corralito tanto mejor, porque es muy práctico en vivo, pero
en estudio tiene la contra de transmitir vibraciones y generar ruidos.
Cuando afines, revisa que no queden llaves ni tuercas flojas; golpea
cada tambor con cuidado para asegurarte no sólo que no haya
vibraciones ni ruidos, sino también que los armónicos
sean los que quieres. Si quieres disminuir o eliminar los armónicos,
bastará con un aro de polietileno o pegar cinta sobre el
parche. Aceita los movimientos (pedales y hi hat) para que trabajen
suaves y sin chirriar. Y con respecto a los platillos, chequea que
las arandelas de goma que los sujetan por el centro estén
intactas y centradas, y que las tuercas mariposa de los pies de
platillos no estén falseadas, para evitar roces y chillidos.
Y ahora, a grabar.
Usando
dos micros
Comencemos
por lo más simple: es posible hacer una buena toma de batería
acústica con sólo dos micros? Si la sala tiene buena
reverb o es muy apagada (para añadirle después reverb
en la mezcla), puedes hacer una toma respetable dependiendo del
estilo musical y del sonido buscado. Si es para jazz o alguna balada
suave puede funcionar, pero si es para rock o buscas un sonido contundente,
es recomendable hacer una segunda toma de sólo tarola y bombo
para reforzar el sonido. Para tomas con dos micros recomiendo usar
dos condensadores de diafragma grande en posición X –
Y (diafragmas a 90º lo más cerca posible), colocados
a 1.5 – 2 mts. frente a la batería. Otra posición
distinta es a 3 mts. por delante, a 90 cms de altura y separados
1 m entre sí, apuntando al conjunto (es verdad que así
no se respeta la regla del 3 x 1 para evitar cancelaciones de fase
- la distancia entre micros debe ser al menos tres veces la distancia
de ellos a la fuente sonora - , pero funciona); también puedes
usar un micro condensador estéreo por delante. Si el batero
toca muy fuerte y los micros tienen pad de atenuación, no
dudes en activarlo. Tómate tu tiempo en encontrar una posición
en la que escuches a todos los componentes de modo equilibrado,
que es la tarea más difícil de esta técnica.
Micros
aéreos (Overheads)
No
pienses que los aéreos son útiles sólo para
captar platillos. Mientras que los micros cercanos tienden a enfocarse
en el ataque de cada tambor, los overheads cuidadosamente posicionados
recogerán más del cuerpo de cada tambor, brindando
un sonido más lleno que el que obtendrías con sólo
micros cercanos. Yo suelo usar dos micros condensadores de diafragma
pequeño (Shure SM 81o Beyerdynamic Opus 53, ver crítica
de este último en Músico Pro Junio 2005) en posición
X –Y elevada (evitando así problemas de fase), sobre
un punto medio entre los platos y el cuerpo del batero, y apuntando
a los tambores , porque los platos se tomarán bien por la
cercanía a los micros. También tienes la opción
de alejar los micros entre sí utilizando una posición
de par espaciado, que es la que usualmente ves en concierto. Siempre
coloca los micros de tal manera que tomen los platos por arriba
en todo momento; si los toman por un lado y el borde del platillo
cruza el frente del micrófono al ser golpeado, obtendrás
por resultado un sonido desparejo y desagradable. Si planeas hacer
una grabación con cuatro micros, los aéreos deben
captar el balance sonoro entre platos, tambores y hi hat (quedando
los dos micros restantes para tarola y bombo); como debes captar
el sonido real del conjunto, usa micros y preamplis de la mejor
calidad posible para lograrlo.
Tarola
Un buen sonido de tarola es clave para un buen |
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sonido de tarola es clave para un buen sonido de batería
por ser el componente más notorio en su sonido; recuerda
Fine Young Cannibals (con el tema She Drives Me Crazy) y a Alex
Van Halen, ambos reconocidos por “ese” sonido. El objetivo
ahora es obtener un buen sonido en la pista. Te recomiendo usar
un Shure SM 57 o, en su defecto, un micrófono dinámico
de patrón polar cardioide colocado dos pulgadas sobre el
aro y apuntando al parche en un ángulo de 45 a 65º;
a esta distancia captará cuerpo gracias al efecto de proximidad
(si capta mucho cuerpo, aléjalo del parche). Ten mucho cuidado
en dos cosas: que esté de espaldas al hi hat, para que lo
tome lo menos posible, y que no moleste al baterista a la hora de
tocar (ya de por sí los micros son algo intimidatorio, imagínate
si molestan...). Una forma más de engrosar el sonido de la
tarola es colocar un micro debajo de ella , apuntando al centro
del parche inferior. Cuando mezcles ambas señales para lograr
el sonido final grabado, invierte la fase una de ellas para evitar
cancelaciones de fase.
Bombo
Sin
duda, este es el componente de la batería con mayores alternativas
a la hora de grabar. Hablando de prepararlo para las tomas, puedes
dejarle puesto el parche frontal, usar un parche frontal calado
o directamente no usarlo; también puedes dejar el interior
libre o asordinarlo con material absorbente. Hablando de micrófonos,
para enfatizar los graves tienes la opción de tomarlo con
un micro dinámico para bajas frecuencias, como por ejemplo
el EV RE 20 o el AKG D 112; si buscas un sonido natural, puedes
usar uno de los “sospechosos de siempre”: Shure SM 57
o Sennheiser MD 421; cualquiera de ellos tiene una respuesta plana
en bajas frecuencias y hará un buen trabajo. Mientras más
alejes el micro del parche trasero, más gordo será
el sonido obtenido. Si no usas parche frontal, es aconsejable no
apuntar el micro al punto de contacto entre el mazo del pedal y
el parche trasero, porque resultará en un sonido seco, fino
y sin contundencia, aparte de captar demasiados armónicos.
Vemos un bombo al que se le introdujo dentro un cojín y una
pequeña placa de material acústico en contacto con
ambos parches, secando así el sonido "thud" y disminuyendo
los armónicos indeseados. Se colocó el AKG D-112 delante
del calado del parche frontal donde se obtuvo un sonido con peso,
buen cuerpo y ataque bien definido, con un buen balance de resonancia
y transientes.
Hi
hat
Es
muy probable que necesites destacar el sonido del hi hat, y los
aéreos no lo tomen lo suficiente. Para ello, te recomiendo
usar un micro de diafragma pequeño con patrón polar
hipercardioide, para que el sonido del resto de los componentes
de la batería se cuele en la toma lo menos posible. Sitúalo
a una distancia de entre 20 y 30 cms. del platillo superior del
hi hat, apuntando al centro en un principio, y muévelo hacia
el punto medio entre el centro y el borde del mismo hasta encontrar
el mejor punto de toma.
Algunas
ideas sueltas
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Antes de pulsar el botón rojo, siempre chequea el sonido
de cada micrófono por auriculares para asegurarte que sea
el sonido buscado. Trata de encontrar el sonido con la posición
del micro sin pensar en usar EQ; un pequeño cambio de posición
de micro siempre implica un cambio bastante notorio en el sonido,
especialmente en microfoneo cercano.
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Si necesitas un sonido más compacto y contundente en la tarola
y/o el bombo, tienes la opción de rutear la señal
a un compresor antes de ser grabada; no cometas el error de usar
el compresor en extremo porque no hay vuelta atrás.
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Al escuchar dos señales de micro mezcladas, si escuchas vacíos
en el rango sonoro o sonidos extraños, es posible que se
deba a cancelaciones de fase; invierte la fase de una de las señales
en la mezcla y vuelve a escucharla.
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Para escuchar una mezcla primaria de la batería completa
en el caso de usar cuatro micros o más, comienza por los
aéreos paneados en estéreo y agrégale paulatinamente
bombo, tarola y hi hat; rutea estas últimas tres señales
por una compuerta de ruido para limpiarlas de sonidos colados en
la toma.
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Experimenta, rompe las reglas. Si para ti y tu cliente suena bien,
entonces está bien.
Y
siempre recuerda que estoy del otro lado de un email. Hasta la vuelta.
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